Los vidrios inteligentes son vidrios que cambian sus propiedades y su apariencia, permitiendo optimizar las condiciones ambientales de un espacio según el uso y las necesidades de sus ocupantes.
Esta tecnología de vidrios electrocrómicos funciona al cambiar la polarización eléctrica entre algunos de sus componentes, y su variante más utilizada es la conocida como PDCL. Esta consiste en una película muy delgada de cristal líquido que se ubica entre dos capas plásticas transparentes conductoras (generalmente de vidrio laminado), que cambia su apariencia de un tono transparente a un tono opaco.