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Arquitectos: After Party
- Área: 150 m²
- Año: 2020
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Fotografías:Giedrius Mamavičius
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Este proyecto se encuentra ubicado en el área suburbana de Lituania. Bordeado por dos de sus lados por vecinos, al sur por una carretera local y al norte por un exuberante riachuelo. Estas dos condiciones opuestas que enfrenta el sitio dieron como resultado un volumen que pareciese estar cortado por la mitad y cubierto por una capa de césped que alberga el espacio habitable debajo. Con el objetivo de compensar la biodiversidad local, el techo inclinado que mira al norte se convierte en una cubierta ajardinada, en donde crecen hierbas y flores para las abejas y los pequeños insectos circundantes, creando una vista verde continua desde las orillas del río.
Junto con eso, el volumen cortado asegura que el patio en el lado norte que da hacia el río reciba la luz del sol sin interrupciones durante todo el día. El volumen es interrumpido por la gran terraza de madera que crea una sensación de soledad y enmarca el río como si fuera una habitación más fuera de la casa. La espaciosa terraza induce naturalmente a que muchas actividades interiores se desarrollen bajo un cielo abierto, al borde de un exuberante huerto al que se pueda acceder a pie descalzo. El espacio interior blanco actúa como un fondo ascético para la vida, lleno de una selección consciente de los muebles y objetos más importantes, cada uno con su propia historia única. Una espaciosa sala de estar se ubica al interior, frente a la terraza, con una gran abertura que realza la naturaleza. Las ventanas orientadas al norte brindan vistas sin producir un sobrecalentamiento durante las estaciones cálidas, mientras que en el lado sur, la gran abertura del piso superior garantiza luz natural y calidez durante los meses más fríos.
Una elevación bastante pragmática hacia la carretera se cubre con yeso rugoso cepillado realzando la inclinación de la pendiente y reaccionando a un entorno más urbano de las casas vecinas. Casa junto al río se niega a usar rejas y se abre al contexto circundante, creando una continuidad con la naturaleza. Liberándose de las cosas sin valor, tiene como objetivo inspirar un estilo de vida que aprecia las experiencias más que las posesiones.
