Renovado en numerosas ocasiones durante su historia, Gaumont-Alésia, un cine parisino albergado en una estructura que tiene más de 80 años de edad, será renovado por la firma Manuelle Gautrand Architecture. Con un diseño que enfatiza la presencia de filmografía en la cultura moderna, el Gaumont-Alésia se convertirá en un centro cultural atractivo para la ciudad circundante, mostrando la influencia del cine en su interior y exterior.
Ambas fachadas a la calle estarán conformadas de muros cortina de cristal sombreados por paneles metálicos plisados. Estos paneles serán perforados por cientos de "píxeles" LED que generarán una imagen a través de los pliegues. Ambas entradas al edificio se convierten en paredes animadas, con fotogramas de películas de radiodifusión, trailers de películas y anuncios, todos destinados a atraer a los transeúntes. Los LEDS están espaciados a diferentes distancias de los bordes del edificio, generando un efecto graneado alrededor del borde de las imágenes. En las entradas, estos paneles animados se irán “descascarando” hacia arriba, creando un dosel bajo el cual los clientes puedan caminar.