Piensen en la ciudad o pueblo donde viven. ¿Cuánto tiempo tardan en llegar a pie a la tienda? ¿Está la escuela o trabajo lo suficientemente cerca para caminar? ¿Qué tal un parque público, un consultorio médico, una guardería o cualquier otro lugar que visiten a diario? Si bien algunas ciudades ya han considerado lo que significa vivir cerca de todas estas necesidades, otras están renovando sus estrategias de planificación urbana y diseñando sus vecindarios para que sean más amigables para los peatones con el concepto de una “ciudad de 15 minutos”.
Dublin Bridge Park en Columbus, Ohio. Imagen vía Dublin Bridge Park
Los suburbios estadounidenses -como los conocemos hoy- están cambiando y, aunque esta transformación lleva ya algún tiempo en marcha, su situación se ha visto exacerbadamente afectada por la pandemia actual. En una situación en que nos hemos visto obligados a pasar más tiempo en nuestros hogares, naturalmente hemos reevaluado nuestras prioridades y cuestionado nuestra forma de vida actual.
Como consecuencia de ello, gran parte de los habitantes de las grandes ciudades de Estados Unidos, que históricamente se ha concentrado en las zonas urbanas, se está desplazando hacia el interior de una forma aparentemente definitiva. De tal manera, nos enfrentamos a un fenómeno reciente de vaciamiento de los principales centros del país, con la población urbana abandonando las ciudades en busca de mejores condiciones de vida, en este caso, más espacio, privacidad y tranquilidad.
La ONU-Hábitat o la agencia de las Naciones Unidas para los asentamientos humanos y el desarrollo urbano sostenible, cuyo enfoque principal es hacer frente a los desafíos de la rápida urbanización, ha estado desarrollando enfoques innovadores en el campo del diseño urbano, centrados en la participación activa de la comunidad. ArchDaily se ha asociado con ONU-Habitat para ofrecerles noticias, artículos y entrevistas semanales que destacan este trabajo, con contenido directamente de la fuente, desarrollado por nuestros editores.
Alrededor de 440 ciudades de rápido crecimiento en economías emergentes contribuirán para el 2025 a casi la mitad del crecimiento económico mundial. Si se les brindan las herramientas adecuadas de planificación y gestión, esta urbanización “puede ser transformadora, crear empleos, reducir la pobreza y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y ciudadanas”. De hecho, el Programa de Ciudades del Futuro Global (GFCP) tiene como objetivo brindar este apoyo requerido. Basado en los principios de planificación urbana, transporte y resiliencia, el programa proporciona “asistencia técnica para un conjunto de intervenciones específicas para fomentar el desarrollo sostenible y aumentar la prosperidad al mismo tiempo que se alivian los altos niveles de pobreza urbana”.
Ya sea a través de un esfuerzo por proponer una retrospectiva del pasado, una colección de producciones del presente o un conjunto de perspectivas de futuro (sin descartar la serie de posibilidades que impregnan estos marcos temporales), las exposiciones de arquitectura y urbanismo han contribuido a la a lo largo de las décadas para plantear cuestiones importantes sobre los modos de las ciudades y todo lo que las componen. Accesibles para un público amplio –que no necesariamente tiene antecedentes en el área– estos eventos brindan ambientes favorables para explorar un imaginario colectivo sobre el futuro de la arquitectura y las ciudades.
Las ciudades no serían nada sin la sensación de experimentación y el impulso hacia el futuro para romper siempre el status quo en la demanda de una mejor vida urbana. Con tantos diseños y estrategias urbanos exitosos como ha habido, el mundo también ha visto algunos no tan exitosos que se han dejado de lado convirtiéndose en un recuerdo olvidado con el tiempo. Mientras miramos hacia el futuro y especulamos sobre lo que podría y debería ser el futuro de las ciudades, tal vez sea el momento de aprovechar las lecciones aprendidas de estos proyectos fallidos y rendir homenaje a sus desgracias, para que los errores de la historia no se repitan en la actualidad.
Antes de la pandemia, el mundo ya se enfrentaba a una serie de transformaciones globales en el campo de la construcción, donde los países emergentes estaban a la vanguardia de un poderoso cambio económico. Ya que se espera que la población mundial alcance el hito de los 10 mil millones antes de 2100, el sector de la construcción debería poder comprender y adaptarse a las megatendencias que están reformulando el planeta.
Imagen satelital de Bahir Dar (Etiopía) Apoyo al Plan de Estructura Sostenible de Bahir Dar. Imagen cortesía de ONU-Habitat
La ONU-Hábitat o la agencia de las Naciones Unidas para los asentamientos humanos y el desarrollo urbano sostenible, cuyo enfoque principal es hacer frente a los desafíos de la rápida urbanización, ha estado desarrollando enfoques innovadores en el campo del diseño urbano, centrados en la participación activa de la comunidad. ArchDaily se ha asociado con ONU-Habitat para ofrecerle noticias, artículos y entrevistas semanales que destacan este trabajo, con contenido directamente de la fuente, desarrollado por nuestros editores.
Con el fin de ayudar a los gobiernos locales en los países en desarrollo a implementar la nueva agenda urbana y los objetivos de desarrollo sostenible, ONU-Hábitat ha creado la Caja de Herramientas de Planificación Urbana Incremental Participativa, “una metodología paso a paso para evaluar, diseñar, operacionalizar e implementar procesos de planificación”. La guía propone una línea de tiempo de fases, bloques y actividades, lo que ayuda a los líderes de la ciudad, las partes interesadas y la comunidad a tener una visión general integral y estratégica de toda la estrategia.