El pueblo de los Uros, ubicado a 6 km de la Ciudad de Puno, Perú, ha resistido el paso del tiempo sobre islas hechas de totora, un paisaje artificial confeccionado completamente a mano. Su tecnología constructiva se ha transformado en la tradición que ha permitido la permanencia de un pueblo flotante, adaptable y renovable.
A través de este trabajo, les presentamos una tradición arquitectónica que ha posibilitado la subsistencia y el ecosistema de uno de los pueblos indígenas más particulares y remotos de Sudamérica, quienes nos entregan una muestra sensible de sustentabilidad y resiliencia a través de un profundo vínculo con el territorio.
A mano alzada: paisaje y dibujo en la provincia de Misiones. Image Cortesía de Sebastián Galarza
El territorio misionero, en Argentina, asiste, desde el siglo XV, al paso y a la superposición local constante de un gran número de culturas sumamente diversas. Indígenas guaraníes, conquistadores españoles, fundaciones jesuíticas, bandeirantes paulistas, gentes de la República de Entre Ríos y luego de la Provincia de Corrientes, paraguayos, brasileros y, finalmente, un arribo voraz de inmigrantes europeos que huían de las guerras mundiales conforman algunas de las capas de su inmensurable tejido cultural.
https://www.plataformaarquitectura.cl/cl/975198/a-mano-alzada-paisaje-y-dibujo-reunidos-en-croquis-de-misiones-argentinaElías Barczuk Pasamán y Sebastián Galarza
Existen en el mundo miles y miles de parques nacionales destinados a la conservación, estos albergan terrenos mantenidos usualmente en su estado natural para que gente de distintas proveniencias los visite. El significado del término "parque nacional", sin embargo, varía dependiendo de la zona geográfica. En el Reino Unido, por ejemplo, la expresión describe simplemente una zona relativamente poco desarrollada que atrae a los turistas, mientras que en Estados Unidos, esta terminología es mucho más rígida y se refiere a las 63 áreas protegidas gestionadas por el Servicio de Parques Nacionales.
Las técnicas vernáculas y los materiales locales han ganado protagonismo en el debate sobre la arquitectura, pero ¿es posible llevar estos conceptos a los grandes centros urbanos?
El arquitecto amazónico Severiano Porto ya señaló en 1984 la necesidad de pensar en una arquitectura más conectada con su contexto. La lógica del uso de materiales y técnicas locales es cada vez más necesaria cuando pensamos en el impacto que tiene la cadena productiva de la construcción civil en el planeta. No es de extrañar que cada día es más común la cantidad de proyectos basados en el principio de las técnicas vernáculas y el uso de materiales locales, tal como ya lo anunciaba la producción de Severiano desde los años ochenta.
Cada año, en la calurosa y seca ciudad de Djenné, en el centro de Malí, tiene lugar algo especial: la Fête de Crépissage. Este día, que se traduce en el "Festival del yeso", es una jornada en la que toda la comunidad de Djenné colabora para reforzar los muros de barro de la Gran Mezquita de Djenné, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y uno de los hitos arquitectónicos más característicos del continente africano.
Cuando hablamos de arquitectura vernácula, nos referimos al estilo arquitectónico específico de una región – arquitectura que se basa en el uso del conocimiento y los materiales locales para construir edificios. Desde las Casas Colmena de Harran en Turquía, hasta las Casas Malayas tradicionales que se encuentran en todo el sudeste asiático. La arquitectura vernácula de varios lugares continúa siendo una fuente de inspiración para los arquitectos contemporáneos, ya que buscan crear respuestas arquitectónicas sostenibles que se adapten bien a su contexto.
Oratorio Casa de Retiro Fundación Alonso Ovalle, Antofagasta,1991.Archivo GKL.. Image Cortesía de Carla Monforte Kapstein
La Casa de Ejercicios Espirituales proyectada por Glenda Kapstein y Osvaldo Muñoz en 1991 obtuvo numerosos reconocimientos, llegando a ser finalista en la primera versión del premio Pabellón Mies van der Rohe para arquitectura latinoamericana el año 1998, y Premio Internacional PLEA (Passive and Low Energy Architecture) el año 2003. El proyecto emplazado en la ciudad de Antofagasta, se caracteriza por la construcción de una serie de espacios intermedios que articulan no sólo el interior con el exterior en el árido clima desértico, sino también, la trayectoria académica de Kapstein con sus característicos ejercicios prácticos.
El arquitecto, diseñador y futurista estadounidense Buckminster Fuller definió el principio de Dymaxion como "construir cada vez más con menos peso, tiempo y ergios por cada nivel dado de rendimiento funcional".
Carl Pruscha, es un arquitecto austriaco que dedicó principalmente su carrera profesional a investigar y trabajar de cerca en el campo de la arquitectura regional en el mundo oriental, un territorio que se estaba pasando por alto en un momento en el que el movimiento moderno en la arquitectura y en el resto del mundo estaba en auge. A través de una descripción general de su vida, destacaremos algunas de sus obras más relevantes en Nepal y Sri Lanka y comprenderemos cómo Pruscha logró plasmar sus visiones únicas de la arquitectura y las ciudades en sus proyectos construidos.
En todo el mundo, una nueva generación de arquitectos está desafiando el “business-as-usual” y trayendo cambios a poblaciones que antes no tenían acceso a sus servicios profesionales. Este artículo es el primero de una serie que presenta esta nueva práctica que lleva las relaciones transaccionales con los clientes a colaboraciones más profundas y basadas en la confianza. Lo llamamos arquitectura Do-It-Together.
https://www.plataformaarquitectura.cl/cl/957465/por-que-la-arquitectura-do-it-together-tiene-un-potencial-radicalArchitecture in Development
Grupo BANGA. Em sentido horário: Yolana Lemos, Kátia Mendes, Gilson Mendes, Mamona Duca e Elsimar de Freitas. Image Cortesia de Grupo BANGA
Puede que el momento nunca haya sido más favorable para invertir nuestras energías en proyectos virtuales. Después de todo, estábamos parcialmente privados del contacto con el mundo concreto de las cosas. Explorando la particularidad del momento actual y el poder del compromiso en Internet, un grupo de arquitectos y arquitectos en África inició un proyecto ambicioso: buscar una nueva identidad para la arquitectura angoleña.
Integrado por Yolana Lemos, Kátia Mendes, Mamona Duca, Elsimar de Freitas y Gilson Menses, el Grupo BANGA es responsable del proyecto Cabana de Arte, que une los esfuerzos de jóvenes arquitectos y artistas de Angola en obras virtuales que, por un lado, buscan dar visibilidad a los profesionales emergentes y, por otro lado, acercar la arquitectura a la vida cotidiana de las personas.
Este año, la Organización Mundial del Turismo de las Naciones Unidas (OMT) ha estado mirando al turismo como una forma de crear empleos y oportunidades en las zonas rurales bajo el lema de Turismo y Desarrollo Rural.
La arquitectura de base rural y los edificios tradicionales juegan un papel importante en la exhibición de la construcción y la artesanía del patrimonio local. También puede ofrecer trabajos y perspectivas fuera de las grandes ciudades, especialmente para las comunidades que de otro modo podrían quedar atrás.
“Las tecnologías indígenas no están perdidas ni olvidadas, sólo ocultas por la sombra del progreso en los lugares más remotos de la Tierra". En su libro Lo-TEK: diseño por indigenismo radical, Julia Watson propone revalorizar las técnicas de construcción, producción, cultivo y extracción llevadas adelante por diversas poblaciones remotas que, generación tras generación, han logrado mantener vivas prácticas culturales ancestrales integradas a la naturaleza, con un bajo costo ambiental y una sencilla ejecución. Mientras las sociedades modernas trataban de conquistar la Naturaleza en nombre del progreso, estas culturas indígenas trabajaban en colaboración con ella, comprendiendo los ecosistemas y los ciclos de las especies para articular su arquitectura en un todo integrado e interconectado simbióticamente.
Casa Qingxiao / Shulin Architectural Design. Imagen cortesía de Yilong Zhao
Restringida por la falta de transporte y recursos, la arquitectura vernácula ha comenzado a adaptar la estrategia distinta de utilizar materiales locales. Al analizar proyectos que han incorporado con éxito estas características en su diseño, este artículo ofrece una visión general de cómo los materiales tradicionales, como azulejos, metal, rocas, bambú, madera, tierra apisonada y ladrillos se están transformando a través de la arquitectura vernácula en China.
Amateur Architecture Studio, Museo Histórico de Ningbo, 2008. . Image Courtesy of Louisiana
En los últimos dos siglos, las ciudades en China se han multiplicado y han sufrido una gran y acelerada expansión demográfica. La demolición masiva de su paisaje histórico, está dejando restos industriales y restos de su cultura enterrados para siempre bajo brillantes y altos rascacielos. A medida que las antiguas ciudades chinas se derrumban y los nuevos centros urbanos se extienden, una parte de la ciudad se pierde y se descuidan elementos importantes de la cultura cívica y social. Wang Shu y Lu Wenyu, los primeros ciudadanos chinos en ganar el Premio Pritzker de Arquitectura, han estado lidiando con esta delicada situación a diario desde el comienzo de su carrera, desarrollando una arquitectura que busca construir puentes entre el pasado y el presente, trabajando con materiales reciclados y conocimientos tradicionales. A continuación, exploraremos algunas de las principales obras construidas por esta pareja, como el Museo Histórico de Ningbo, Ningbo (2008), la Academia de Arte del Campus Xiangshan de China, Hangzhou (2004) y el Museo de Arte Contemporáneo de Ningbo (2005).
Como el gran filósofo, Mike Tyson dijo: "Todo el mundo tiene un plan hasta que los golpeen en la boca".
La pandemia de COVID-19 impactará profundamente el mundo de la estética. Por primera vez desde que se fundó la Liga de las Naciones, un futuro de estética universal puede dejar de ser el Canon arquitectónico sancionado académicamente. Como Markus Breitschmid lo define, en su artículo "En defensa de la validez del 'Canon' en arquitectura", el Canon en arquitectura es una forma de divorciar la arquitectura del resto del mundo:
Antiguamente, los hombres y las mujeres vivían de sus cultivos, materializaban sus construcciones a partir de los elementos disponibles en su entorno y recorrían grandes distancias en busca de los recursos necesarios para su subsistencia. Esto condujo a una mayor comprensión del territorio por parte del ser humano, a una observación cercana del comportamiento de la naturaleza y a la comprensión y utilización de los materiales locales para la construcción de sus viviendas. Es en esta estrecha relación hombre-entorno que surge la arquitectura vernácula de San Pedro de Atacama, compuesta materialmente por tierra, piedra, brea, paja, y madera de chañar y algarrobo. En la actualidad, el crecimiento de la ciudad, causada por un incremento constante de las actividades turísticas, sumada a la ausencia de normas que defiendan la identidad constructiva del pueblo, ha generado el surgimiento de nuevas construcciones que atentan contra el patrimonio construido de la zona.