Zbraslav Square . Image Courtesy of Architects for Urbanity
Reconociendo la importancia de los concursos internacionales para impulsar los conceptos y el diseño inventivos, ArchDaily ha reunido una selección curada de la mejor arquitectura no construida con proyectos de todo el mundo. Enviados por nuestros lectores, estos proyectos incluyen propuestas ganadoras, menciones honoríficas y reconocidas admisiones.
Según los registros escritos que nos han permitido estudiar la historia de la humanidad, la "prehistoria" puede definirse como el período de tiempo abarcado entre el 35.000 a.C. y el 3.000 a.C. en el caso del Oriente Medio –en el caso de Europa occidental, se extiende hasta el o hasta el 2.000 a.C.-. Según lo que se pudo observar y registrar, los antiguos constructores ya tenían un profundo conocimiento de las condiciones ambientales y de las necesidades físicas del ser humano. Inicialmente organizados en grupos o tribus, los humanos utilizaron estructuras construidas con piel y huesos de animales para protegerse del clima y las amenazas del mundo exterior. Miles de años más tarde, las primitivas cabañas evolucionaron hasta convertirse en complejas estructuras construidas en ladrillo o barro, asumiendo formas geométricas más definidas con aberturas intencionalmente generadas para permitir la ventilación e iluminación natural de los espacios interiores.
El arquitecto y artista visual Mohammad Hassan Forouzanfar ha estado combinando conceptualmente hitos contemporáneos con casas, palacios y monumentos tradicionales iraníes en una serie de fotos titulada "Retrofuturism". En su última exploración, Peace, el arquitecto persa se enfoca el sitio cultural de Persépolis de Irán, la antigua capital del Imperio Aqueménida.
La arquitectura de Irán se ha arraigado durante mucho tiempo en la cultura persa. Desde casas de té y pabellones hasta cabañas domésticas y mezquitas elaboradas, el entorno construido del país está vinculado a estas influencias, así como al paisaje y su contexto más amplio. En el corazón de los proyectos más recientes de Irán se encuentra el deseo de reinterpretar la historia a través de nuevos espacios y formas.
El arquitecto y artista visual Mohammad Hassan Forouzanfar se ha dedicado a combinar conceptualmente hitos contemporáneos de la arquitectura con casas y palacios tradicionales iraníes mediante una serie de imágenes titulada "Retrofuturism". En su última colección, el arquitecto persa eligió desplazar estructuras icónicas y colocarlas en pinturas del país del siglo XIX del artista Eugène Flandin.
A menudo hay un debate sobre si los arquitectos e ingenieros deben restaurar edificios antiguos y preservar lo que todavía está en pie como una muestra del pasado, o demolerlos por completo e introducir diseños y características contemporáneas. En Irán, los restos de monumentos históricos –algunos de los cuales son Patrimonio de la Humanidad– aún no conocen su destino, debido a que las estrategias de restauración siguen siendo inciertas.
Los monumentos arquitectónicos tradicionales iraníes a menudo se construyen cerca del suelo debido a la falta de tecnología de viga y columna. Los palacios, mezquitas y edificios públicos se construyen con solo uno o dos pisos, y la arquitectura iraní rara vez presenta torres o edificios de gran altura como resultado.
Las aldeas y ciudades en Irán siempre han tenido un skyline horizontal fijo de baja altura debido a la falta de tecnología constructiva de vigas y columnas. Aunque algunas ciudades ya han adoptado estilos contemporáneos y han construido rascacielos altísimos, la mayoría de las ciudades siguen comprometidas con las técnicas de construcción tradicionales.
Saffar Studio ha publicado detalles de su propuesta para la Mezquita y Plaza Golshahr en Alborz, Irán. Inspirado por un diálogo entre contexto y función, el esquema está impulsado por el deseo de aumentar la sociabilidad y las interacciones entre las personas en una plataforma sostenible.
El diseño de Ashari Architectspara una instalación arquitectónica en Irán, es una respuesta morfológica a la necesidad de volver a conectarse con los sentidos. El proyecto, un pabellón que se construye a partir de un cubo y un volumen suspendido de ladrillos, evidencia la potencialidad del uso de este material en la generación de atmósferas.